Lo del rol este año ha sido tristísimo. Siete partidas, ocho sesiones, dos de las cuales fueron finalizar partidas empezadas en 2022. Este año sólo he podido empezar y acabar una partida. Para 2024 mi deseo sería poder jugar más. Ya es darse con un canto en los dientes volver a hacerlo, pero mi esperanza es poder jugar un poco más.
1. La habitación sin sellar, de La llamada de Cthulhu [finalizando partida del 2022]. Tercera vez que la dirijo y segunda vez que la consigo acabar.
2. Frenar la negrura, módulo de La llamada de Cthulhu incluido en Umbrales a la oscuridad [finalizando partida del 2022], con mi sobrina y amiguis.
3. La fortaleza sin sol, un clásico de D&D para mi sobrina y amiguis [inacabada].
4. Una conspiració sense fissures, para L'Anell Únic, como actividad de refuerzo de catalán [inacabada].
5. Volrac el nigromante, partida de cosecha propia para Tiny Dungeon, para mi hija mayor y amigas, en verano [inacabada].
6. El huésped cadáver, un teórico one-shot de La llamada de Cthulhu incluido en Portales al terror, que aderecé usando el clásico Las tierras del sueño [inacabada por 10m].
7. Cold Harvest, un módulo de Chaosium para La llamada de Cthulhu que lleva a los personajes a un sovkhoz soviético, única partida que conseguí finalizar en condiciones y de la que todo el mundo quedó muy satisfecho.
Como se ve, ha ganado de calle La llamada de Cthulhu, mi juego preferido y que sigue estando en buena forma, además de poder ofrecer partidas muy diferentes. Destaco también la prueba con el sistema de EAU, que me gustó mucho y espero poder repetir.
1 opiniones:
Bueno Cisne....
al menos tú puedes jugar, yo hace años que no puedo y tampoco tengo con quien :__(
Así que aférrate al lado bueno ;D
Un beso
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